¿Qué es la autoestima? La autoestima es el amor a uno mismo, el reconocimiento del valor que tenemos cada uno de nosotros como personas, el respeto a los demás comenzando por el respeto hacia si mismo, y en definitiva la base sobre la que debe asentarse nuestra estabilidad emocional y la confianza en nuestras propias posibilidades de acción. Es lo único que nos puede dar esa seguridad en nosotros mismos y en nuestras decisiones que, muchas veces, tanto necesitamos encontrar.

   Hoy en día está muy de moda sacar siempre lo peor de nosotros mismos. Si reconocemos nuestros defectos se dice que somos humildes (siendo ésta una cualidad muy valorada por la sociedad actual); pero, en cambio, si comentamos nuestras virtudes se dice que somos unos creídos, nada modestos, unos narcisistas... (todo ello cualidades muy mal valoradas, pero en su justa medida muy necesarias). Es posible que, si caemos en cualquiera de los dos extremos, es decir, tanto si nos criticamos siempre, como si nos ensalzamos constantemente, llegamos a un situación personal nada deseable, simplemente porque no estamos siendo capaces de ver la realidad.

   Pero... ¿cuál es la realidad? Lo cierto es que todos tenemos virtudes y defectos. Si nos centramos sólo en las virtudes, vamos a tener la impresión de que todo lo hacemos bien y como resultado no vamos a ser capaces de aprender cosas nuevas de otras personas. Si nos centramos sólo en los defectos, no podemos apoyarnos en nuestras virtudes para superar los problemas o situaciones de nuestra vida diaria, por lo que nos hundiremos lentamente en un estado de tristeza y apatía que no potencia el desarrollo ni el crecimiento como personas.

   En el punto medio estaría la autoestima. Las personas que se quieren y se respetan a si mismas, saben de sus defectos, son capaces de ver cuándo se están equivocando, pero al mismo tiempo saben de sus virtudes, de sus puntos fuertes y se apoyan en ellos para aceptarse y para ver el mundo de una forma mucho más positiva. La autoestima es lo que va impulsar nuestra vida hacia aquellas metas que queremos conseguir.

   Generalmente, cuando no nos valoramos a nosotros mismos, lo que hacemos es depositar nuestra autoestima en los demás. ¿Qué significa esto? Significa darle una parte muy importante de nosotros mismos a otras personas que no siempre son las más adecuadas. De este modo si el otro nos dice algo positivo, entonces será porque 'tengo derecho a tener autoestima', pero si en cambio se enfada con nosotros, nos regaña o nos trata mal, es porque tal y como habíamos pensado 'no tengo derecho a que nos traten adecuadamente porque no valgo nada'.

   Pero la pregunta sería: ¿acaso el estado de ánimo de otra persona puede hacerme a mí más o menos valioso? Yo no lo creo. Hay que pensar que todos somos valiosos por lo que somos y tal y como somos, no por lo que los demás nos puedan decir, o por los logros o acciones que pueda conseguir en la vida.

La falta de autoestima puede llevar a serios problemas

Depresión. Víctimas de maltrato físico y/o psicológico y/o sexual. Trastornos de alimentación: anorexia, bulimia y obesidad. Problemas de ansiedad. Apatía. Dificultad a la hora de buscar solución a los problemas de la vida cotidiana. Estrés y problemas laborales. Problemas de comunicación e interacción con los demás. Problemas de pareja. Ideación suicida. Víctimas de mobbing o acoso laboral en el entorno de trabajo. Dificultad a la hora de aprender las habilidades sociales.

   No hay que olvidar que, para poder entregarse adecuadamente a los demás, para poder querer libremente a otras personas y respetar a todo el mundo, hay que empezar por quererse, entregarse y respetarse a uno mismo.

   Averigua mediante la realización del test que presentamos en la columna de la derecha, cómo es tu autoestima y si se está convirtiendo en un problema para ti y tu relación con los demás.